Y COMO LA PROFESIÓN ME ELIGIÓ A MI
Estaba pensando como me iba a estrenar en esta nueva aventura de publicar un blog, y pensando en ello me plantee cómo y cuando decidí que quería ser abogada, es decir, como elegí esta profesión que tanto condiciona al resto de mi vida; y así recordé que yo estudié BUP y COU por la rama que denominamos ciencias, y que incluía matemáticas, física, química y biología, de hecho siempre he pensado que era una bióloga frustrada, entonces ¿cómo llegué a este mundo?
Entre toda la vorágine de imágenes que ahora acuden a mi cabeza, y que ahorro a quien pueda leer este rincón, que como todos sabemos se inicia con clases, estudios a deshoras, exámenes y café, me veo en mi primer juicio, subiendo las escaleras de un Juzgado de lo social de Madrid, con los nervios a punto de estrangularme y pensando ¿qué hago yo aquí?
Pues bien, ahora veo con meridiana claridad, que desde el primer momento, desde el primer minuto en que empecé a ejercer esta profesión, adquiri un compromiso ante todo personal con cada caso, con cada cliente y su propia situación vital, con los buenos y los malos, con todas las versiones, pero más aún adquirí un compromiso con la sociedad y conmigo: debemos construir un mundo justo, donde las frases "no hay derecho" y "no es justo", sean la escepción, y esa es también mi responsabilidad.
Entonces ¿así fue como elegí esta profesión? y saltando por primera vez ante mis ojos, la respuesta, no, yo no elegí, fue ella quien elegió, me enamoró desde dentro, me sedujo y ahora se que no soy una bióloga frustrada, SOY ABOGADA, con toga o sin ella y pretendo en este rincón compartir con quien quiera mis experiencias cotidianas, hacer crítica de todo aquello que lo merece, contactar con quien quiera hacerlo para intencambiar opiniones y vivencias y pasar buenos ratos.
Queda inagurado este blog